Antes que nada felicitarte por haber sido finalista del XV Premio Odisea. ¿Cómo surgió la idea de escribir ‘Los chicos buenos no mueren en saunas’?
Muchas gracias, la verdad es que es un honor inesperado que me hace muy feliz. La idea surge hace un par de años, pero hasta el verano pasado no la materialicé. Estaba en pleno bache creativo y me tomé la libertad de fantasear, de jugar con esta historia y poco a poco fue creciendo. ¡Casi no llego al plazo del concurso!
¿Eres un apasionado de la novela negra?
Más que de novela negra soy apasionado de la novela clásica de misterio, el whodunnit tradicional de Agatha Christie. La ficción de misterio, de intriga con asesinatos siempre me ha atraído tanto literaria como televisivamente.
¿Cómo te sientes tras haber quedado finalista del XV Premio Odisea de Literatura?
La verdad es que es una sensación maravillosa, es como si me hubieran dado el carné oficial de escritor, como si hubiera pasado de amateur a profesional. Mi sueño, como el de todo escritor aficionado, es ver tu novela en el escaparate de una librería, ver materializado tu esfuerzo, tu ilusión. Que además reconozcan tu trabajo en un premio literario con el bagaje y la reputación del de Odisea es la guinda del pastel.
- ¿Montoya
o Nerim? ¿Cuál de los dos policías es tu favorito?
Supongo
que ambos, ya que a los dos les he dado mucho de mí, como al resto de los
personajes. Montoya es un tío sencillo, que disfruta de su vida, de sus
amantes, su Play, sin ambages ni dobleces. Nerim es más cabeza loca, no sabe
muy bien lo que quiere, por eso es un picaflor, que dará mucho que hablar.
¿Qué
te parece la actitud de Montoya respecto al amor o a tener una pareja estable?
¿Crees que es algo habitual hoy en día? ¿Podrías mantener varias relaciones a
la vez como el atractivo inspector?
Montoya
decide tener dos no-novios porque no quiere compromisos, no le juzgo, pero yo
nunca lo haría. Siempre he opinado que es muy difícil mantener una relación con
una persona como para intentarlo con varias a la vez. Siempre
ha habido relaciones abiertas, poliamor o como lo queramos llamar, supongo que
ahora, en pleno siglo XXI, es más visible.
En
la novela me interesaba reflejarlo como algo normal, sin dramas ni traumas, como
lo que es, una opción tan válida como las demás.
"Siempre ha habido relaciones abiertas, poliamor o como lo queramos llamar, supongo que ahora, en pleno siglo XXI, es más visible".
¿Qué
te ha resultado más atractivo, ponerte en la piel de la víctima o del asesino?
Realmente
ambos ejercicios resultaron agotadores, sobre todo hacer hablar al asesino.
Intentar justificar sus actos mientras los escribes es verdaderamente
complicado. Lo más ingrato fue escribir las patochadas homófobas de Otxoa.
La
novela está genialmente ambientada en Madrid, ¿has reflejado tus rincones
favoritos de la ciudad en esta novela?
Mi
intención era escribir una novela muy malasañera, en la que los personajes se
movieran libremente por un Madrid moderno y en ebullición. Los lugares,
edificios, museos o calles son por los que yo paso habitualmente, por eso quería
reflejarlos, me interesaba mucho la verosimilitud en ese aspecto, ya que en
otros es todo absolutamente inventado por mí.
"El futuro ya está aquí y es digital".
Los chicos
buenos no mueren en saunas se lanzará de manera simultánea en papel y en
digital, ¿eres lector de ebook? ¿Crees que el ebook terminará devorando el
papel?
El futuro ya está aquí y es digital. La forma tradicional de vender
libros, o incluso la de escribirlos, ha cambiado radicalmente. Los autores, las
editoriales, las librerías incluso los lectores, tenemos que ponernos las pilas
y subirnos al carro digital, no ver al ebook como un enemigo a batir sino como
un aliado.
¿Existe la
literatura gay? ¿Qué otros títulos de temática LGTB has leído?
Existe y debe existir. El problema es que al ponerle una etiqueta habrá
quien no se atreva a acercarse a una espléndida novela por ser para gais. Los últimos que leí fueron La flor más oscura de Daniel Fuertes y Estoy
preparado de Khalo Ali.
¿Qué
otros proyectos tienes para el futuro?
Rematar la siguiente novela de Qino Montoya, ya
que quedan muchas cosas por saber de este oso inspector. Y me gustaría escribir
una novela para adolescentes.